Glaucoma crónico de ángulo cerrado
El glaucoma crónico de ángulo cerrado es una enfermedad ocular grave que se caracteriza por un aumento de la presión intraocular debido al bloqueo del ángulo de drenaje del ojo. Los síntomas incluyen dolor ocular intenso, visión borrosa, halos alrededor de las luces y enrojecimiento ocular. Es fundamental un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado para prevenir daños permanentes en el nervio óptico.
Glaucoma de ángulo cerrado tratamiento farmacológico
El tratamiento farmacológico del glaucoma de ángulo cerrado incluye el uso de colirios con el objetivo de reducir la presión intraocular y mejorar el flujo de líquido en el ojo. Estos medicamentos pueden ser betabloqueantes, agonistas alfa-adrenérgicos, análogos de las prostaglandinas, inhibidores de la anhidrasa carbónica, entre otros. Es fundamental seguir las indicaciones del oftalmólogo para controlar la enfermedad de manera efectiva.
Glaucoma primario de ángulo cerrado
El glaucoma primario de ángulo cerrado es una forma hereditaria y bilateral de glaucoma que se presenta principalmente en personas de ascendencia asiática. Se caracteriza por un cierre angular anatómico que dificulta el drenaje del humor acuoso, aumentando la presión intraocular. Es importante realizar un seguimiento oftalmológico periódico para detectar posibles complicaciones y controlar la progresión de la enfermedad.
Glaucoma secundario de ángulo cerrado
El glaucoma secundario de ángulo cerrado puede deberse a diversas causas, como la inflamación ocular, la presencia de tumores intraoculares, traumatismos oculares, entre otros factores. El tratamiento dependerá de la causa subyacente y puede incluir desde terapias farmacológicas hasta procedimientos quirúrgicos para mejorar el drenaje del ojo y reducir la presión intraocular.